Iron Maiden: Legacy Of The Beast Tour - Ciudad De México - Palacio De Los Deportes - 29/Septiembre/2
Fotos: facebook@LulúUrdapilleta
Alan Cortés - sopitas.com
El Legado De La Bestia: Una Banda Atemporal
Iron Maiden nos trajo su Legacy of the Beast Tour. Esta gira está inspirada en el videojuego de mismo nombre, lanzado para los teléfonos móviles.
La legendaria banda británica se presentó alrededor del mundo del 26 de mayo del 2018 al 15 de octubre del 2019, 82 presentaciones, Europa, Norteamérica y Sudamérica. Además, la agrupación informó que llegarán con El Legado al Belsonic Festival en Belfast, Irlanda, y al Download Festival en Donington Park, Inglaterra, ambos en 2020.
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Fieles a su costumbre, Steve Harris (bajista), Bruce Dickinson (vocalista), Dave Murray (guitarrista), Adrian Smith (guitarrista), Janick Gers (guitarrista) y Nicko McBrain (baterista) no escatimaron en la producción, -fue impresionante-. Elementos teatrales, celebrando su amplia y magnífica trayectoria de casi 45 años, -nos regalaron un espectáculo sin igual-.
The Raven Age fue la banda telonera, dejó un gran sabor de boca, joven agrupación formada en 2009, riffs potentes, Metal Melódico, con algo de Groove; su presencia se apoderó del escenario, logró la aprobación de la gente y calmó nuestra impaciencia por escuchar a Iron Maiden.
El recital de Maiden fue soberbio, su setlist se compuso de 16 canciones. Se trató de un repaso por la discografía, con algunos clásicos y con algunas sorpresas muy gratas.
La apertura se dio con un promocional al videojuego, el clásico “Doctor Doctor” de UFO, y el ex primer ministro de Inglaterra, Winston Churchill, con su conocido discurso “We shall fight on the beaches”, esta fue la antesala de la primera canción de la noche: “Aces High”, este tema homenaje a los pilotos que murieron en los años 40's durante la llamada Batalla de Inglaterra, -Bruce Dickinson vestido de piloto y un avión gigante detrás dieron un explosivo inicio-.
Continuaron con una de las sorpresas: “Where Eagles Dare”, y luego el clásico “2 Minutes to Midnight”. -Siguió una de las canciones que más disfruté: “The Clansman”-, habla sobre la libertad y resistir a nuestro opresor, -fue magnífica-.
Una de las más coreadas: “The Trooper”, -el poder de las tres guitarras al unísono nos envolvió, así como el poderoso bajeo de Harris, mientras Dickinson "libraba una batalla contra Eddie", de la que pudo salir victorioso-.
Con un despliegue de energía impresionante de parte de los seis integrantes, vendrían más: “For the Greater Good of God”, “The Wicker Man” y “Sign of the Cross”, nos deleitaron con el virtuosismo musical y la teatralidad.
Con un Ícaro gigante, con sus alas detrás de la escenografía, arribó “Flight of Icarus”, por supuesto Dickinson haciendo uso de un lanzallamas, hacia más espectacular el performance y al final la muerte de Ícaro quien se desplomó ante nuestros ojos, -sencillamente espectacular-. Después vendrían los acordes de “Fear of the Dark” que levantaron un alarido del público con el clásico “oh oh oh oh oh oh…”, Bruce vestido con un esmoquin y una máscara dorada de cuervo, con una lámpara en la mano, -los riffs de Dave, Adrian y Janick, hicieron de esta insignia de la banda un momentazo del concierto-, también se les podía notar una gran felicidad en sus rostros. “The Number of the Beast”, cuya introducción nos volvió locos, se desarrolló acompañada de fuego, la fuerza y vigor de los acordes nos tenían cautivados.
La primera parte del setlist cerró con "Iron Maiden" y el coreo del público: “Oh well, wherever, wherever you are, Iron Maiden’s gonna get you, no matter how far, see the blood Flow watching is shed, up above my head, Iron Maiden Wants you for dead”, -soberbio, espectacular cierre-, acompañado de la enorme cabeza de Eddie. Con más poder nos presentaron “The Evil That Men Do”. Luego sonó “Hallowed be Thy Name”, -esta canción por si misma amerita un artículo, es mi favorita de la Doncella de Hierro-, relato magnífico, sublime y estremecedor sobre un hombre, el cual no se arrepiente de sus crímenes, piensa que la vida es una ilusión que no puede ser entendida sino hasta que la muerte es inminente, ante el hecho de ser ahorcado piensa que la verdad de la vida está en "la otra vida", -composición espléndida-. Y la ejecución en vivo por supuesto nos deleitó, Bruce hizo uso de una soga y una jaula para sumar a la teatralidad de esta obra maestra, cuando explotaron los riffs, el público estalló a la par. -Nos hicieron vibrar intensamente con esta interpretación antológica-.
El cierre del concierto llegó con “Run to the Hills”, -no podría ser de otra forma-, la batería marcando el intro, Dave Murray rasgando su guitarra en una muestra de talento, luego entró el bajo, después Bruce hizo lo propio, -un estallido de Heavy Metal puro-, el siempre enérgico Dickinson, a pesar de estar en el final, seguía en su vaivén por la escenografía, -una maravilla presenciar este espectacular concierto-, así se despidió Iron Maiden, mostrando el músculo que a pesar del paso de los años sigue poderoso.
El Legado de la Bestia consta de 16 álbumes, un avión pilotado por el propio vocalista, videojuegos, una iglesia, una marca de cerveza, documentales, Eddie (la conocida mascota que evoluciona tras cada material), espectáculos con impresionantes escenografías, sold outs en el rincón del mundo que se paren, y un sinfín de fanáticos de muy diversas generaciones.
Claramente la juventud se les esfuma, pero el talento y la energía con la que se apoderan del escenario es algo sin fecha de caducidad, nos dejaron claro que el Legado de la Bestia es espectacular, -composiciones sublimes, un despliegue de talento musical único, un gran compromiso con la teatralidad y con canciones que trascienden el tiempo, Iron Maiden se ha convertido en Una Banda Atemporal-.
Ante un público de casi 22 mil personas. Con una representación de la historia de cada canción; una ornamentada batería de Nick McBrain; sombreros de charro; banderas mexicanas, entre muchos otros elementos. Con un espectáculo teatral reconocido por Dickinson como el más complejo creado por la banda hasta ahora, nos embelesaron a lo largo de una hora y 45 minutos aproximadamente, nos dejaron claro por qué son una leyenda del Metal. -Up the Irons-.
Setlist:
Transylvania (Promo del videojuego Legacy of the Beast)
Doctor Doctor (UFO)
Discurso de Churchill
1. "Aces High"
2. "Where Eagles Dare"
3. "Minutes to Midnight"
4. "The Clansman"
5. "The Trooper"
6. "Revelations"
7. "For the Greater Good of God"
8. "The Wicker Man"
9. "Sign of the Cross"
10. "Flight of Icarus"
11. "Fear of the Dark"
12. "The Number of the Beast"
13. "Iron Maiden"
Encore:
14. "The Evil That Men Do"
15. "Hallowed Be Thy Name"
16. "Run to the Hills"
Always Look on the Bright Side of Life (Monty Python)
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